Niñas, niños, jóvenes y adultos participan del programa “Modo Verano” que realiza la Alcaldía de San Miguelito a través de la dirección de Gestión Social en diferentes sectores del distrito, las cuales iniciaron el pasado lunes, 15 de enero, con talleres de educación y cultura, para el disfrute de estas vacaciones 2018.
Canto, grafity, folclore, danza urbana, teatro, rap-dj, break dance, pintura, artes plásticas y defensa personal son parte de las actividades que se realizan de lunes a viernes, en Los Andes Mall, en el Salón A y B; en Brisas del Golf, específicamente en la Casa de la Tercera Edad y Jubilados que está en el parque, y en el Complejo de Torrijos Carter.
En tanto, el lunes, 22 de enero, iniciaron los cursos de reforzamiento académico en la Escuela Louis Martinz, en un horario de 9:00 a.m. a 12:00 medio día, donde los estudiantes reciben afianzamientos en materias como: matemática, inglés y español.
Es importante señalar que a partir del 29 de enero, inician las actividades deportivas como: fútbol, natación, basquetbol y béisbol, las cuales se desarrollarán en el Complejo Deportivo de Torrijos Carter.
El alcalde del distrito de San Miguelito, Gerald Cumberbatch indicó que las actividades de verano serán hasta el 2 de marzo, por lo que pidió a los padres de familia a que participen junto con sus hijos de los diferentes programas culturales, educativos y deportivos.
“Sabemos que el ocio es nuestro peor enemigo y no podemos permitir que nuestro jóvenes y niños se queden en casa para estas vacaciones. Por eso desde la alcaldía junto a todo el equipo hemos programado estas actividades para darle una alternativa a las comunidades”, destacó el alcalde Cumberbatch.
Reiteró que la Alcaldía de San Miguelito en conjunto con la Dirección de Deporte y Gestión Social, han preparado un sin número de actividades recreativas con el objetivo de mantener a los adolescentes y niños ocupados y de esta forma alejarlo de la violencia y los malos vicios.
Se espera la participación de más de 10 mil niños y niñas del distrito.
Por: Damaris Ballesteros- Periodista